sábado, 2 de junio de 2012

La mafia del fútbol boliviano y su puñado de eternos privilegiados



La mafia del fútbol boliviano y su puñado de eternos privilegiados

Verdaderamente es lamentable como se ha manejado y maneja todavía el fútbol boliviano en casi todas sus estructuras dirigenciales, pero principalmente desde la creación de la LFPB (Liga del Fútbol Profesional Boliviano) en el año 1977, como un magro apéndice de la FBF (Federación Boliviana de Fútbol), entidad encargada exclusivamente de confeccionar los tediosos e intrincados campeonatos nacionales año tras año.

Dentro de la dirigencia del fútbol nacional se ha enquistado una rancia aristocracia de unos pocos privilegiados que no sirven para nada y todavía se dan el lujo de tener jugosos ingresos, viajes de primera clase (dentro y fuera del país) con estadías en hoteles de cinco estrellas y suculentos viáticos. A esta gentuza que dirige el fútbol nacional no le interesa para nada el verdadero Fútbol Nacional, tan solo le interesa no perder sus privilegios, influencia y poder económico, labrados mafiosamente a lo largo de varios años, organizando una estructura palaciega corrupta afín y que además le responda a todos sus mezquinos intereses.

En Bolivia por parte de los dirigentes del fútbol jamás se tuvo como verdadero objetivo el unir e integrar el país con el deporte rey, el Fútbol Nacional, ya que hasta la fecha el fútbol que se dice a nivel “nacional”, no pasa de ser una magra representación del fútbol del eje troncal, donde justamente ésta actual rancia dirigencia tiene asentados todos sus tentáculos palaciegos, relegando así a importantes ciudades intermedias y distritos del norte y el sur de Bolivia, como también, a importantes clubes con historia y tradición futbolera del mismo eje troncal.

Uno se pregunta ¿Por qué en Bolivia, el campeonato “nacional” del fútbol de primera división cuenta con tan solo 12 equipos profesionales...?, y la respuesta es simple y sencilla, es porque a los actuales dirigentes que se han enquistado como sanguijuelas o garrapatas en las diferentes estructuras del fútbol nacional, no quieren ver perdidos sus intereses, privilegios, poder e influencia, siendo fiscalizados y confrontados por otros nuevos dirigentes que de seguro ya no les permitirían despilfarrar o robar la plata del fútbol boliviano, ni mucho menos funcionar como una verdadera mafia organizada dentro del fútbol nacional. Esta gentuza podrida que esta al frente del manejo del fútbol boliviano está empecinada en mantener inamovible las viejas estructuras corruptas, todo tal como está, porque de esta forma tienen asegurado el puesto y la tajada de la torta sin tenerla que compartir con nadie más.

Pero esto no puede seguir así, tarde o temprano se van a tener que tomar medidas drásticas para hacer cambios profundos en el fútbol nacional, ojalá que sea por la buenas y en forma concertada (con las mayorías y no con las cúpulas), porque de lo contrario, los cambios se los van a tener que hacer a punta de patadas y puñetes, haciendo rodar muchas cabezas de “avivados” que se han robado o despilfarrado la plata del fútbol boliviano, fungiendo con el “mote” de dirigentes del fútbol nacional y haciendo de la seudo dirigencia su holgada forma de ganarse la vida.

Es necesario hacer cambios profundos en nuestro fútbol, dando más participación y prioridad a nuestra propia gente joven, que lamentablemente no tiene ninguna posibilidad de mostrarse y destacar, porque las estructuras obsoletas y caducas del fútbol boliviano actual lo impiden.

Para comenzar, se debe democratizar e integrar al fútbol nacional a importantes regiones del país que nunca han tenido fútbol profesional, aumentando la cantidad de equipos de fútbol en la Liga a por lo menos 20 Equipos Profesionales En Primera División, porque en el país hay elemento joven y talento en muchos distritos que hasta ahora nunca han sido tomados en cuenta y que a la larga es talento frustrado y desperdiciado.

A los doce equipos ligueros actuales se deben añadir 3 equipos en calidad de invitados y cinco nuevos equipos en calidad de promoción, de tal suerte que el próximo campeonato nacional debe contar con 20 equipos en primera división.

Los tres equipos invitados deben ser: Guabirá (Montero), Real Mamoré (Trinidad) y Destroyers (Santa Ceuz)

Los cinco equipos en promoción deben ser Ciclón o Gárcia Ágreda (Tarija), Real Vaca Diez (Cobija), Oruro Royal (Oruro), Bata (Quillacollo) y Stormers Sporting Club (Sucre).

No olvidar que en la historia de la Liga hay antecedentes de que hubo épocas en las que se invitó a equipos hasta sumar la cantidad de 15 equipos ligueros.

La democratización del fútbol nacional debe implementarse ahora mismo, sin miedos, reparos ni mezquindades, no es posible que en pleno siglo XXI la liga y el fútbol boliviano se estén manejando todavía con la misma mentalidad caduca y mezquina de los fundadores de la Liga del año 1977, donde los recursos, transportes y facilidades eran escasos. Hoy en día muchos equipos bolivianos que no están dentro del eje troncal podrían funcionar cómodamente, porque éstos tiempos son muy distintos al año 1977, ahora existen los auspicios comerciales y sponsors, facilidad de transporte, ingresos por televisación de los eventos, fuera de la venta de las localidades de los escenarios (en calidad de local), etc. .

Solo se necesita gente nueva, dirigentes sanos que administren responsablemente y encaren con decisión el proyecto de manejar un equipo de fútbol.
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1 comentario:

Anónimo dijo...

Que el hombrecito que escribio este blog diga su nombre verdadero, ya que es bieen hombrecito pareciera ser..