En Bolivia existen demasiadas estaciones de televisión, en comparación con los distintos países vecinos que nos rodean. Pero lo curioso de todo esto, es que nuestro país, siendo un mercado bastante chico y pobre, (ya que si consideramos que la población total de todo el país apenas bordea los 10 millones de habitantes) donde además, importante segmento de la población no tiene siquiera acceso a un televisor (principalmente en las áreas más alejadas de los centros urbanos y peri urbanos), como ser en el área rural, donde aún ni siquiera se tienen los servicios elementales y básicos, Entonces resulta casi inaudito que un país tan pobre, con tan poca población (comparativamente), tenga tantos medios televisivos (siendo algunos de éstos medios, hasta redes de cobertura nacional). La única respuesta cierta y posible a esta gran paradoja, es que la gran mayoría de las teledifusoras privadas de este país, son propiedad de gente que hoy es muy rica, poderosa e influyente porque ha amasado sus enormes fortunas de forma ilegal y fraudulenta, ya que ha estado encaramada o muy vinculada a la politiquería contemporánea nacional (la era de la mafiocracia neoliberal), robando impunemente al país o beneficiándose flagrante e ilícitamente de muchas dádivas y recursos con los cuales les fue fácil el apoderarse y armarse con toda la artillería y el arsenal mediático (radio, prensa y TV).
Estos medios privados son usados actualmente únicamente como palestra mediática opositora, para defender, salvaguardar y encubrir los privilegios e intereses (de casta burguesa) de sus propietarios, además de ser usados solo como un recurso mediático televisivo de hacer intransigente oposición y confrontación al gobierno del actual presidente Evo Morales Ayma, para impedir (de cualquier forma) a que éste pueda llevar adelante sus políticas de cambio, justicia y reivindicación de los más oprimidos.
Muchos de estos medios oligarcas son manejados en la actualidad solo por simples testaferros para no involucrar directamente a sus verdaderos propietarios, quienes por medio de sus esbirros tratan de inducir su falsa ideología sectaria para sembrar un aculturamiento o transculturización con el fin central de promover e inculcar una vaga y mentirosa visión regionalizada del país, para engañar y someter al pueblo, y así no perder los privilegios y el poder del cual gozan a discreción gracias a todo lo robado en forma impune al país, cuando éstos eran parte del régimen de la mafiocracia (MNR, ADN, MIR, UCS, NFR, MBL, etc.) en el manejo del estado, durante todos los gobiernos neoliberales que se turnaron el poder. Estos medios no tienen y no están interesados en alentar una conciencia nacional, dentro de su ideología de alineación tratan por sobre todo de imponer un proceso de aculturización para pretender romper la identidad, conciencia y los valores nacionales.
Haciendo uso alegre y flagrante de la libertad de expresión, en la cual se escudan y encubren su verdadero libertinaje de comunicación, (con mentiras, tramoyas, notas fabricadas, especulación, hostigamiento, amarillismo, desafío, confrontación, etc.) con la cual bombardean a diario su frenético veneno mediático a la población nacional.
Muchos de estos dueños de de TV privados solo tienen a su medio para hacer politiquería barata. Actualmente los principales medios y redes de TV se hallan afincados en la ciudad de Santa Cruz y son propiedad de estos poderosos sátrapas que ahora además están camuflados como empresarios agroindustriales, ganaderos, latifundistas terratenientes, ex politiqueros fracasados del neoliberalismo, empresarios mineros, empresarios ganaderos y forestales, logias de masones, etc. y están plenamente identificados con los intereses sediciosos de la prefectura (Rubén Costas) y el Comité Cívico (Branco Marinkovic).
Casi todos los propietarios de estos medios privados de comunicación llevan una amplia hegemonía en casi todos los ámbitos del quehacer de la economía, son como una especie de poderosos pulpos con varios tentáculos, ya que son también a la vez, empresarios que tienen intereses en muchos otros diferentes rubros como ser: agroindustriales, ganadería, socios en empresas de servicio de aviación, empresarios de servicios de telefonía móvil y comunicaciones, son ex politiqueros, son latifundistas terratenientes, empresarios mineros, masones, logieros, dueños o socios de medios de radio y prensa, socios o dueños de empresas bancarias, dueños de cadena de supermercados, importadores de electrodomésticos, tecnología e insumos, etc., etc. En fin, manejan casi todo el ámbito que mueve la riqueza de una u otra forma. Ellos ponen los anuncios comerciales (de sus empresas y sus productos) en sus propios medios de TV y no en otros de la competencia, y apoyan solo a aquel espacio que mas o menos les permita ganar unos pesos mas vendiendo algunos de los productos de sus diferentes empresas, Vale decir, que TODO el afán comercial se mueve dentro de su mismo conglomerado empresarial. No ocurre como en otros países donde los propietarios de los medios, son gente que casi en exclusiva se dedica al rubro de sus medios (ya sea radio, prensa y/o TV), y los sectores empresariales de los diferentes rubros del comercio pertenecen a otras sociedades empresariales que nada tienen que ver con el medio de TV, y solo son el nexo donde tienen que anunciar y vender sus productos. En esos países los medios de TV tienen que batallar muy duro (casi palmo a palmo) por el reiting (con los demás medios de la competencia) para ganar los auspicios comerciales de las empresas anunciantes. Es por esa razón que aquí la televisión boliviana (producción nacional) es la quinta rueda del carro, porque sencillamente a sus dueños no les importa para nada los valores nacionales, nuestra gente, nuestros talentos, sus propios recursos humanos, la aptitud que ellos puedan tener, su proyección, etc. Ni les interesa en lo mínimo ofrecer una TV verdaderamente nacional porque para eso se necesita mucho profesionalismo, inversión y sobre todo, mucho trabajo duro.
El manejo referente a la “cobertura nacional” de las redes de TV es retrógrada, porque de nacionales no tienen mucho (yo diría casi nada), ya que estos medios privados manipulan y manejan según como le convenga, se le antoje (o se le cante) a sus propietarios, es decir, las redes de alcance nacional solo se enlazan para mostrar lo que a sus propietarios les convenga mostrar (solo son redes nacionales para mostrar películas, dibujos, series, telenovelas, etc. y otras banalidades para adormecer el cerebro de la gente común, con el fin de cuidar y resguardar sus intereses de clase, poder y privilegios). los programas donde se tratan temas con contenidos de orden político son “regionalizados” de forma tal que, mientras en la ciudad de La Paz se está tratando un tema candente (y de interés nacional) que quizás vaya en contra de los intereses de sus propietarios, sencillamente en la regional del oriente, el mismo programa bajo la conducción de otra persona está tocando otro tema de diferente índole (totalmente inocuo a los intereses de sus propietarios), ocurre viceversa cuando ocurre lo contrario. Por Ej. El programa “Que no me pierda” (Red UNO), “Al Despertar” (Unitel), “El Mañanero” (red UNO) tienen tres versiones diferentes, una para La Paz, otra para Cochabamba y otra para Santa Cruz. “Frente a Frente” programa de Gigavisión sale solo para La Paz, pese a que la mayoría de los temas que se tratan son de interés nacional, pero sencillamente a sus propietarios no les interesa mostrarlo a nivel nacional, etc. Es inconcebible y hasta estúpido pero también los noticiarios en algunas redes son “regionalizados” para facilitar su manipulación y darle el tenor o la carga ideológica que le convenga al dueño del medio, para solo precautelar sus intereses y los de sus allegados, entonces se coarta la libertad de expresión en forma sistemática y flagrante, de modo tal que lo que se dice en cada regional no se conoce en un contexto nacional. Es algo tan tonto que solo puede ser pensado por gente o que es estúpida o no tiene la más peregrina idea de lo que es hacer comunicación de masas, o que solo manejan su medio mezquina, interesada y políticamente.
Estos medios privados son usados actualmente únicamente como palestra mediática opositora, para defender, salvaguardar y encubrir los privilegios e intereses (de casta burguesa) de sus propietarios, además de ser usados solo como un recurso mediático televisivo de hacer intransigente oposición y confrontación al gobierno del actual presidente Evo Morales Ayma, para impedir (de cualquier forma) a que éste pueda llevar adelante sus políticas de cambio, justicia y reivindicación de los más oprimidos.
Muchos de estos medios oligarcas son manejados en la actualidad solo por simples testaferros para no involucrar directamente a sus verdaderos propietarios, quienes por medio de sus esbirros tratan de inducir su falsa ideología sectaria para sembrar un aculturamiento o transculturización con el fin central de promover e inculcar una vaga y mentirosa visión regionalizada del país, para engañar y someter al pueblo, y así no perder los privilegios y el poder del cual gozan a discreción gracias a todo lo robado en forma impune al país, cuando éstos eran parte del régimen de la mafiocracia (MNR, ADN, MIR, UCS, NFR, MBL, etc.) en el manejo del estado, durante todos los gobiernos neoliberales que se turnaron el poder. Estos medios no tienen y no están interesados en alentar una conciencia nacional, dentro de su ideología de alineación tratan por sobre todo de imponer un proceso de aculturización para pretender romper la identidad, conciencia y los valores nacionales.
Haciendo uso alegre y flagrante de la libertad de expresión, en la cual se escudan y encubren su verdadero libertinaje de comunicación, (con mentiras, tramoyas, notas fabricadas, especulación, hostigamiento, amarillismo, desafío, confrontación, etc.) con la cual bombardean a diario su frenético veneno mediático a la población nacional.
Muchos de estos dueños de de TV privados solo tienen a su medio para hacer politiquería barata. Actualmente los principales medios y redes de TV se hallan afincados en la ciudad de Santa Cruz y son propiedad de estos poderosos sátrapas que ahora además están camuflados como empresarios agroindustriales, ganaderos, latifundistas terratenientes, ex politiqueros fracasados del neoliberalismo, empresarios mineros, empresarios ganaderos y forestales, logias de masones, etc. y están plenamente identificados con los intereses sediciosos de la prefectura (Rubén Costas) y el Comité Cívico (Branco Marinkovic).
Casi todos los propietarios de estos medios privados de comunicación llevan una amplia hegemonía en casi todos los ámbitos del quehacer de la economía, son como una especie de poderosos pulpos con varios tentáculos, ya que son también a la vez, empresarios que tienen intereses en muchos otros diferentes rubros como ser: agroindustriales, ganadería, socios en empresas de servicio de aviación, empresarios de servicios de telefonía móvil y comunicaciones, son ex politiqueros, son latifundistas terratenientes, empresarios mineros, masones, logieros, dueños o socios de medios de radio y prensa, socios o dueños de empresas bancarias, dueños de cadena de supermercados, importadores de electrodomésticos, tecnología e insumos, etc., etc. En fin, manejan casi todo el ámbito que mueve la riqueza de una u otra forma. Ellos ponen los anuncios comerciales (de sus empresas y sus productos) en sus propios medios de TV y no en otros de la competencia, y apoyan solo a aquel espacio que mas o menos les permita ganar unos pesos mas vendiendo algunos de los productos de sus diferentes empresas, Vale decir, que TODO el afán comercial se mueve dentro de su mismo conglomerado empresarial. No ocurre como en otros países donde los propietarios de los medios, son gente que casi en exclusiva se dedica al rubro de sus medios (ya sea radio, prensa y/o TV), y los sectores empresariales de los diferentes rubros del comercio pertenecen a otras sociedades empresariales que nada tienen que ver con el medio de TV, y solo son el nexo donde tienen que anunciar y vender sus productos. En esos países los medios de TV tienen que batallar muy duro (casi palmo a palmo) por el reiting (con los demás medios de la competencia) para ganar los auspicios comerciales de las empresas anunciantes. Es por esa razón que aquí la televisión boliviana (producción nacional) es la quinta rueda del carro, porque sencillamente a sus dueños no les importa para nada los valores nacionales, nuestra gente, nuestros talentos, sus propios recursos humanos, la aptitud que ellos puedan tener, su proyección, etc. Ni les interesa en lo mínimo ofrecer una TV verdaderamente nacional porque para eso se necesita mucho profesionalismo, inversión y sobre todo, mucho trabajo duro.
El manejo referente a la “cobertura nacional” de las redes de TV es retrógrada, porque de nacionales no tienen mucho (yo diría casi nada), ya que estos medios privados manipulan y manejan según como le convenga, se le antoje (o se le cante) a sus propietarios, es decir, las redes de alcance nacional solo se enlazan para mostrar lo que a sus propietarios les convenga mostrar (solo son redes nacionales para mostrar películas, dibujos, series, telenovelas, etc. y otras banalidades para adormecer el cerebro de la gente común, con el fin de cuidar y resguardar sus intereses de clase, poder y privilegios). los programas donde se tratan temas con contenidos de orden político son “regionalizados” de forma tal que, mientras en la ciudad de La Paz se está tratando un tema candente (y de interés nacional) que quizás vaya en contra de los intereses de sus propietarios, sencillamente en la regional del oriente, el mismo programa bajo la conducción de otra persona está tocando otro tema de diferente índole (totalmente inocuo a los intereses de sus propietarios), ocurre viceversa cuando ocurre lo contrario. Por Ej. El programa “Que no me pierda” (Red UNO), “Al Despertar” (Unitel), “El Mañanero” (red UNO) tienen tres versiones diferentes, una para La Paz, otra para Cochabamba y otra para Santa Cruz. “Frente a Frente” programa de Gigavisión sale solo para La Paz, pese a que la mayoría de los temas que se tratan son de interés nacional, pero sencillamente a sus propietarios no les interesa mostrarlo a nivel nacional, etc. Es inconcebible y hasta estúpido pero también los noticiarios en algunas redes son “regionalizados” para facilitar su manipulación y darle el tenor o la carga ideológica que le convenga al dueño del medio, para solo precautelar sus intereses y los de sus allegados, entonces se coarta la libertad de expresión en forma sistemática y flagrante, de modo tal que lo que se dice en cada regional no se conoce en un contexto nacional. Es algo tan tonto que solo puede ser pensado por gente o que es estúpida o no tiene la más peregrina idea de lo que es hacer comunicación de masas, o que solo manejan su medio mezquina, interesada y políticamente.
Solo imaginemos a la televisión Mexicana (azteca, televisa, etc.), Argentina (América, Telefe, etc.), Chilena (UC-13, Megavisión, Chilevisión, etc), Brasilera (SBT, Globo, Record, Bandeirantes, etc.) etc. (por mas privados que sean estos medios) haciendo noticiarios o programas regionalizados (en sus respectivos países) según el gusto y capricho de sus dueños o testaferros….., NO EXISTE TAL, es imposible que en esos países se pudiera llegar a hacer semejantes burreras.
Considero que nuestra televisión actual (nacional o privada) está rezagada (siendo optimista por lo menos en unos diez años) y sumida en un atraso profundo ya que para nada maneja conceptos actualizados y modernos (en todos los ámbitos) que hoy en día son elementales saber manejarlos apropiadamente y los cuales son requisitos imprescindibles en otros medios de afuera, sin ir muy lejos en los medios de los países que nos rodean. La mayoría (no todos) de nuestros comunicadores no tendrían cabida ni funcionarían en un contexto internacional porque primeramente no son para nada originales (son reticentes a la autoformación, no son capaces de superarse por si solos y crear un estilo propio), son muy vulnerables en cuanto a copiarlo todo de afuera, desde el histrionismo, los modismos y la forma de hablar o actuar, hasta el ridículo de poner los mismos contenidos que nos vienen del extranjero (pero en forma mediocre y doméstica). Pero lo peor de todo es que la mediocridad es el común denominador últimamente en algunos comunicadorcillos baratos, los cuales se esfuerzan y empeñan en hacer un mal uso del lenguaje castellano, al simplemente usar solo un miserable seudo lenguaje (gauchocruceñizado), que mas bien los limita aún más, en lugar de hacerlos crecer y superarse. Solo en Bolivia es posible ver que venga un extranjero (argentino, mexicano, colombiano, peruano, brasilero, etc.) a trabajar en los medios bolivianos y ni siquiera se les exijan que por lo menos hablen correctamente el idioma castellano, o al menos, se interioricen plenamente con la idiosincrasia nacional.
En Bolivia toda la televisión es manejada casi en forma amateur y empírica, los comunicadores que dicen saber de su oficio están supeditados a solo obedecer las ordenes, disposiciones y los lineamientos ideológicos de sus mandantes o patrones, y en realidad muchos de ellos están recontrarequete atrasadísimos en todos los aspectos, tanto así, que en honor a la verdad, dudo mucho que pudieran funcionar afuera de nuestras fronteras (Solo quisiera ver a alguno de ellos (ellas) intentando hacer un programa o simplemente un casting en un medio internacional (de algún lado de afuera) con su pobre gauchocruceñizado lenguaje, lo mas seguro es que en forma mínima se llevarían de regalo una patada en el poto).
Respecto a los contenidos de programación en forma genérica son verdaderamente paupérrimos y en gran medida están llenos de “enlatados baratos” (películas, series, novelas, dibujos, etc.) para rellenar su pésima programación. En todo esto, como dijimos ya antes, la producción nacional es la quinta rueda del carro y está destinada a solo magros programas de análisis y opinión, informativos, revistas, musicales, infantiles, seudo entretenimiento y deportivos.
La televisión boliviana no va a cambiar en nada a menos que los medios dejen de pertenecer a politiqueros o empresarios ladrones y pasen a ser propiedad de verdaderos comunicadores que sepan realmente que la televisión es un negocio de la industria del entretenimiento, sin perder nunca de vista la identidad, originalidad y los valores nacionales por sobre todas las cosas. La televisión es glamour, show y espectáculo, es un negocio donde hay que pelear palmo a palmo para lograr seducir (en el buen sentido de la palabra) al televidente y a los auspiciantes para ganar el tan ansiado reiting (rating). Manejado con profesionalismo, audacia, criterio y visión empresarial puede ser contextualizado como una poderosa actividad dentro del rubro de la industria del entretenimiento.
Muchos medios privados en Bolivia están predestinados a solo conseguir un rotundo fracaso y a desaparecer paulatinamente, porque la mayoría solo han emergido en el ámbito mediático como consecuencia de un entusiasmo momentáneo y coyuntural de la politiquería barata, vivida durante la decadencia del neoliberalismo (mafiocracia), Y actualmente trabajan sin siquiera un norte definido que les permita proyectarse como una real alternativa mediática del show y espectáculo o como un verdadero medio de comunicación en un contexto internacional.
Todo medio de comunicación que se precie de tal, tiene que estar orientado por sobre todo a satisfacer las expectativas, requerimientos y necesidades del televidente común (usuario final), y no así a solo los caprichos de su propietario (ya sea empresario o político). El avance de la tecnología es acelerado e implacable ya que con la televisión digital (TDT) va a ser el televidente el que va a decidir que tipo de contenido, que tipo de programa y a que hora va a querer ver un determinado espacio, sin que un director de programación, prensa, editorialista o propietario del medio puedan hacer algo por impedirlo. La TDT (televisión digital terrestre) nos va a ofrecer una televisión diferente, además de ofrecernos una recepción con calidad HQ DVD al vivo, aunque se esté en pleno movimiento. El Internet y la TDT en algún momento van a fusionarse, de modo tal, que cualquier persona en el mundo va a poder emitir sus propias creaciones y contenidos desde cualquier parte del planeta y tener televidentes en un contexto mundial, Las telecomunicaciones y los adelantos tecnológicos van a romper los viejos esquemas tradicionales de hacer TV y van a democratizar mucho mas la opinión de la gente en un contexto global (mundial). Solo los medios más aptos, que se manejen profesionalmente y se adapten rápidamente a los vertiginosos avances tecnológicos continuos de la cibernética y los adelantos científicos, pero ante todo, puedan usarlos de forma adecuada en su propio beneficio para captar la atención y satisfacer las necesidades, requerimientos y las expectativas que tiene la teleaudiencia común, van a lograr sobrevivir al maremagnun tecnológico que se nos avecina. Los medios de TV analógicos (actuales que existen por doquier en el país) que no se adapten a los cambios tecnológicos van a ser desechados tal como hoy son desechados los viejos discos de vinilo y sus reproductores.
Considero que nuestra televisión actual (nacional o privada) está rezagada (siendo optimista por lo menos en unos diez años) y sumida en un atraso profundo ya que para nada maneja conceptos actualizados y modernos (en todos los ámbitos) que hoy en día son elementales saber manejarlos apropiadamente y los cuales son requisitos imprescindibles en otros medios de afuera, sin ir muy lejos en los medios de los países que nos rodean. La mayoría (no todos) de nuestros comunicadores no tendrían cabida ni funcionarían en un contexto internacional porque primeramente no son para nada originales (son reticentes a la autoformación, no son capaces de superarse por si solos y crear un estilo propio), son muy vulnerables en cuanto a copiarlo todo de afuera, desde el histrionismo, los modismos y la forma de hablar o actuar, hasta el ridículo de poner los mismos contenidos que nos vienen del extranjero (pero en forma mediocre y doméstica). Pero lo peor de todo es que la mediocridad es el común denominador últimamente en algunos comunicadorcillos baratos, los cuales se esfuerzan y empeñan en hacer un mal uso del lenguaje castellano, al simplemente usar solo un miserable seudo lenguaje (gauchocruceñizado), que mas bien los limita aún más, en lugar de hacerlos crecer y superarse. Solo en Bolivia es posible ver que venga un extranjero (argentino, mexicano, colombiano, peruano, brasilero, etc.) a trabajar en los medios bolivianos y ni siquiera se les exijan que por lo menos hablen correctamente el idioma castellano, o al menos, se interioricen plenamente con la idiosincrasia nacional.
En Bolivia toda la televisión es manejada casi en forma amateur y empírica, los comunicadores que dicen saber de su oficio están supeditados a solo obedecer las ordenes, disposiciones y los lineamientos ideológicos de sus mandantes o patrones, y en realidad muchos de ellos están recontrarequete atrasadísimos en todos los aspectos, tanto así, que en honor a la verdad, dudo mucho que pudieran funcionar afuera de nuestras fronteras (Solo quisiera ver a alguno de ellos (ellas) intentando hacer un programa o simplemente un casting en un medio internacional (de algún lado de afuera) con su pobre gauchocruceñizado lenguaje, lo mas seguro es que en forma mínima se llevarían de regalo una patada en el poto).
Respecto a los contenidos de programación en forma genérica son verdaderamente paupérrimos y en gran medida están llenos de “enlatados baratos” (películas, series, novelas, dibujos, etc.) para rellenar su pésima programación. En todo esto, como dijimos ya antes, la producción nacional es la quinta rueda del carro y está destinada a solo magros programas de análisis y opinión, informativos, revistas, musicales, infantiles, seudo entretenimiento y deportivos.
La televisión boliviana no va a cambiar en nada a menos que los medios dejen de pertenecer a politiqueros o empresarios ladrones y pasen a ser propiedad de verdaderos comunicadores que sepan realmente que la televisión es un negocio de la industria del entretenimiento, sin perder nunca de vista la identidad, originalidad y los valores nacionales por sobre todas las cosas. La televisión es glamour, show y espectáculo, es un negocio donde hay que pelear palmo a palmo para lograr seducir (en el buen sentido de la palabra) al televidente y a los auspiciantes para ganar el tan ansiado reiting (rating). Manejado con profesionalismo, audacia, criterio y visión empresarial puede ser contextualizado como una poderosa actividad dentro del rubro de la industria del entretenimiento.
Muchos medios privados en Bolivia están predestinados a solo conseguir un rotundo fracaso y a desaparecer paulatinamente, porque la mayoría solo han emergido en el ámbito mediático como consecuencia de un entusiasmo momentáneo y coyuntural de la politiquería barata, vivida durante la decadencia del neoliberalismo (mafiocracia), Y actualmente trabajan sin siquiera un norte definido que les permita proyectarse como una real alternativa mediática del show y espectáculo o como un verdadero medio de comunicación en un contexto internacional.
Todo medio de comunicación que se precie de tal, tiene que estar orientado por sobre todo a satisfacer las expectativas, requerimientos y necesidades del televidente común (usuario final), y no así a solo los caprichos de su propietario (ya sea empresario o político). El avance de la tecnología es acelerado e implacable ya que con la televisión digital (TDT) va a ser el televidente el que va a decidir que tipo de contenido, que tipo de programa y a que hora va a querer ver un determinado espacio, sin que un director de programación, prensa, editorialista o propietario del medio puedan hacer algo por impedirlo. La TDT (televisión digital terrestre) nos va a ofrecer una televisión diferente, además de ofrecernos una recepción con calidad HQ DVD al vivo, aunque se esté en pleno movimiento. El Internet y la TDT en algún momento van a fusionarse, de modo tal, que cualquier persona en el mundo va a poder emitir sus propias creaciones y contenidos desde cualquier parte del planeta y tener televidentes en un contexto mundial, Las telecomunicaciones y los adelantos tecnológicos van a romper los viejos esquemas tradicionales de hacer TV y van a democratizar mucho mas la opinión de la gente en un contexto global (mundial). Solo los medios más aptos, que se manejen profesionalmente y se adapten rápidamente a los vertiginosos avances tecnológicos continuos de la cibernética y los adelantos científicos, pero ante todo, puedan usarlos de forma adecuada en su propio beneficio para captar la atención y satisfacer las necesidades, requerimientos y las expectativas que tiene la teleaudiencia común, van a lograr sobrevivir al maremagnun tecnológico que se nos avecina. Los medios de TV analógicos (actuales que existen por doquier en el país) que no se adapten a los cambios tecnológicos van a ser desechados tal como hoy son desechados los viejos discos de vinilo y sus reproductores.
1 comentario:
Hola, llegue a este blog buscando otra cosa... pero dedique un tiempo a ller algunos parrafos del mismo y considero que las palabras expresadas en el contexto de que no se deberia utilizar un medio de comunicacion como un instrumento ya sea politico o regionalista como quieran llamarlo, lo considero antietico desde todo punto de vista pero claro, que importa la opiion de una persona ante un conglomerado de burgueses haciendose cada dia mas ricos a costa de sufrimiento ajeno.... en fin concluyo con esperanza para mi Nación y espero estar pronto en ella y ojala vengan tiempos mejores... para nosotros Bolivianos que queremos un cambio en el sistema... personas con criterio que pensamos que no necesitamos mas que una idea para encender la llama de la libertad... de la libertad verdadera... eegf@msn.com
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